
Le pedí que se dejara de milongas y que me lo
contara de una vez …
—Imagínate—me dijo tras apagar el cigarrillo—
Londres. Una mañana fría y lluviosa de
abril. Es viernes Santo y en el sótano de un edificio situado en el centro de
la ciudad, un grupo de jubilados, sucios y agotados, se...